Tenemos una bruja

- ¡¡Es una bruja!! ¡¡Es una bruja!! Hemos encontrado un bruja, ¿podemos quemarla?
- Y ¿cómo sabéis que es una bruja?
- ¡Parece una bruja!
- ¡Porque se le nota! ¿no lo ves?
- Vos traédmela.
- No soy una bruja, ¡No soy una bruja!
- Es verdad estas vestida de bruja.
- Ellos me vistieron así. Y está no es mi nariz es postiza.
- ¿Y bien?
- Bueno le pusimos la nariz.
- ¿La nariz?
- Y el sombrero. Pero es una bruja.
- ¡¡Es una bruja!! ¡¡Es una bruja!!
- ¿La habéis vestido vosotros así?
- ¡¡No!! no. Sí, un poco. Pero, pero tiene una verruga.
- Y ¿por qué creéis que es una bruja?
- Porque a mi, me convirtió en grillo.
- ¿En grillo?
- ... Y mejoré...
- ¡¡Pero hay que quemarla!! ¡¡Hay que quemarla!!
- Hay diversas formas de saber que es una bruja.
- A ¿sí? ¡¡Dinoslas!!
- Decidme, ¿qué se hace con las brujas?
-¡¡Quemarlas!!¡¡Quemarlas!!¡¡Quemarlas!!
- Bien. Y ¿qué se quema aparte de las brujas?
- ¡¡Más brujas!!
- Madera.
- Y ¿Por qué arden las brujas?
-...
¿porque estás hechas de madera?
- Sí, exacto, exacto. Y ¿cómo se puede saber si esta esté hecha de madera?
- Haciendo un puente con ella.
- Pero ¿no se puede hacer los puentes también de piedra?
- Sí claro.
- Y la madera, ¿se hunde en el agua?
- ¡¡No!! ¡¡Flota!! ¡¡Flota!! ¡¡Tirémosla al pantano!!
- Y ¿qué más cosas flotan en el agua?
- El pan.
- Las manzanas.
- Piedras pequeñas.
- No, no.
- Un cuchillo.
- La salsa verde.
- Un grillo.
- No, no, no...
- Un ganso.
- ¡Exacto! Así que entonces...
- Si pesa lo mismo que un ganso, ¡está hecha de madera!
- Y por lo tanto...
- Umm, es un ¡¡bruja!!
- Bien, usaremos mi balanza.
- ¡¡A la balanza!!, ¡¡a la balanza!!

Los Caballeros de la Mesa Cuadrada.