Se da la bienvenida a todo hombre, mujer, trans...que desee dejar sus dudas o reslover las de los demás en asuntos de faldas. Esto no es una cutrada de consejos rápidos para ligar, o enseñar a vivir y esas parafernalias, sino una plataforma SERIA, donde la gente deja sus dudas para encontrar respuestas FUNDAMENTADAS de los ALFAS del foro, con el propósito de avanzar en su camino hacia el interior del coño.
Quien se vea capacitado para resolver dudas de índole sexual, sentimental, o de puro ligoteo, que se una a los dandys pendencieros del foro.
¿Cuáles son las normas?
No trolear
¿Para quién es esto?
La plataforma va dirigida principalmente a los hombres, ya que las mujeres suelen tener suficiente con ponerse monas y soltarse un poco la melena para pillar cacho. Pero cualquiera es bienvenido para dejar sus consejos o dudas independientemente de su sexo u orientación sexual.
¿Cuáles son los temas a tratar?
Prácticamente cualquiera que tenga algo que ver con el ligue, el folleteo, relaiones o de exs. Todo vale, desde la duda más tonta sobre las señales que supuestamente te está dando una tia, hasta asuntos serios y espinosos de pareja.
¿Quién te crees tú que eres para venir a dar lecciones a los demás?
En primer lugar, aquí no se dan lecciones, se aconseja y se debate libremente aportando experiencia y conocimientos sobre el tema. Todo el mundo es libre de pensar lo que quiera y dar el enfoque que crea más apropiado, esto no es una secta.
Después comentar, que nadie es más que nadie por simplemente tener más experiencia o más facilidad para el noble arte del folleteo. Aquí no venimos a regodearnos en nuestra maestría ni a alimentar nuestro ego, simplemente a tratar de echar un cable a todo aquel que lo necesite.
¿Esta plataforma es machista?
Si consideras machista decir las cosas tal y como son sin tapujos ni miedo a no ser políticamente correctos, sí, esto es lo más machista dentro de un foro lleno de machistas. No confundir esto con el insulto fácil o el cliché tonto, aquí las cosas se razonan y se argumentan, no se dicen por pura misoginia.
LUGARES DE INTERÉS
En este apartado iré poniendo enlaces a sitios, vídeos o incluso libros por qué no, que consideréis interesantes para aprender cosillas relacionadas con los temas que aquí tratamos.
https://www.foroparalelo.com/general...s-vida-518105/
http://fabiofusaro.blogspot.com.es/
Más vale prevenir que curar
Tal vez tu situación no sea exactamente la anterior, pero te la ves venir. Desde hace algún tiempo la notás rara. Aparecieron en su actitud lo que llamaremos “I.D.Q.” (Indicadores de Quilombos) que podrían ser:
• Ya no te mira como antes.
• No reacciona de la misma manera ante un “te quiero”.
• Cuando te atiende por teléfono no demuestra la misma emoción que hace un tiempo atrás.
• Se ve molesta si le preguntás “¿me extrañaste?”
• Le da lo mismo hacer el amor que ver una película o ir a tomar un café.
• Cuando se ven no se calienta en arreglarse mucho.
• Está más peleadora de lo habitual.
Y por lo general todo esto desemboca en los padres de todos los IDQ: los famosos “Estoy confundida” y “Necesito un tiempo”. Por lo general los IDQ nunca vienen de a uno, y son una señal inequívoca de que algo malo está por suceder. Seguramente son producto de que algún compañero de colegio, facultad o trabajo le gusta. O tal vez no le guste pero le anda atrás y las muy estúpidas se
agrandan como sorete en kerosene. O tal vez alguna amiga le esté llenando la cabeza en contra tuyo
con el objeto de presentarle algún amigo, hermano o primo, o simplemente por romper las pelotas, que para eso son mandadas a hacer. Ella en realidad te quiere a vos (por lo menos en la mayoría de los casos es así), pero el otro turro/a te hace la pelea desde las sombras y lamentablemente eso es una ventaja a su favor.
Lo que erróneamente tendemos a hacer cuando empiezan a aparecer los IDQ es intensificar nuestras demostraciones de amor tratando de verla más seguido, diciéndole cosas lindas, regalándole flores, chocolates, sea monkeys, o cuanta pelotudez se nos ocurra.
Con las mujeres en estos casos hay que actuar como con los caballos de salto. Los caballos de salto tienen todos los mejores cuidados, duermen calentitos en un box, tienen la mejor comida, el más esmerado aseo, en fin, más de lo que cualquier animal podría pedir. Así y todo de vez en cuando estos caballitos se ponen medio loquitos, medio histéricos y no quieren darle bola a su dueño.
Cabecean, tiran patadas, no se quieren dejar montar, etc.
¿Qué hacen sus dueños en estos casos? ¿Les dan mejor comida aún? ¿Los bañan más seguido? ¿Les agregan una estufita en el box?
No. Todo lo contrario. Los mandan al campo. Sí, los sueltan y les dicen: “Andá y saltá, cabeceá y pateá todo lo
que quieras así te sacás las ganas. Y el yocaba sale corriendo por el medio del campo, sin montura,
sin riendas, sin nada, y salta, cabecea, patea, corre, relincha y todo lo que se le canta. Al otro día vuelve caminando, mansito mansito, hacia su dueño y
se le para al lado esperando que lo acaricie.
Ya se le fue la locura. Ya no tiene más ganas de joder. Bueno, con estas yeguas, perdón, con las mujeres hay que actuar de la misma manera. ¿Se encabritan más de la cuenta? ¿Te cuestionan cualquier pavada? ¿Aparecen varios IDQ al mismo tiempo, y luego el clásico "Estoy confundida"? Bueno, más vale prevenir que curar. Mandala al campo como a los caballos de salto. Sin demostraciones de dolor decile OK y andate. Eso sí, no la llames, no la veas y es fundamental que no tenga
noticias tuyas ni por medio de amigos en común. El tiempo que puede transcurrir en este estado es variable. Puede ser desde un día a… unos cuantos, pero no queda otra que tener paciencia y ponerse firme en esa postura porque ahí es donde se va a dar cuenta de lo que le está faltando, y es ahí donde le va a entrar a ella el miedo a perderte. Va a volver sin duda caminando mansita a
comer de tu mano.
Están viendo una película de amor, de las que les gustan a ellas. De ésas que con ver el título uno ya sabe que se trata de un hombre y una mujer que se enamoran y luego tienen un quilombo pero después se amigan. Esas películas de mierda que tienen nombres tales como “El cariño de tu amor”, “El amor de los dos”, “Dos para un amor”, “Que hermoso es amarte” etc.
En el final de esa película el galancete de turno, que seguramente tiene una facha bárbara y alguno de los hombres presentes lo acusó de ser puto con el asentimiento de los demás hombre y los “Callate,
nada que ver” de las damas, va en busca de una reconciliación.
¿Cómo lo hace? Se pone su mejor ropa, compra un gigantesco ramo de flores y va de noche, debajo de una lluvia infernal a tocar el timbre de su amada y cuando ella sale, le dice con ojos lagrimosos: “He comprendido que no puedo vivir sin ti”.
Entonces ella lo abraza y lo besa llorando, y es ahí cuando oímos los suspiros de las mujeres presentes y tenemos que escuchar comentarios tales como “Qué divino”, “Cómo no vas a volver con un tipo que hace eso”, “Me muero con un hombre así”.
Si trasladamos esto a la vida real pueden pasar alguna de las siguientes cosas:
• Que nos quedemos empapados tocando el timbre con las flores en la mano y que nadie salga porque la mina se fue de joda.
• Que se escuche la voz del padre que le grita a la hija: “¡Che, nena, ahí en la puerta hay un pelotudo todo mojado con unas flores!”
• Que nuestra ex le diga al tipo que está en bolas en la cama con ella: “Esperá que le alcanzo un paraguas a este nabo para que se vuelva a la casa que se va a enfermar, pobre”.
Del abrazo emocionado y el llanto, nada. ¿Y entonces? Es que aunque parezca raro, a las mujeres no les gusta lo que
dicen que les gusta.
Cuando yo tenía dieciocho años hicimos en la casa de una
compañera de colegio, una reunión de todo el curso por el viaje de egresados. Los viajes de egresados en aquella época, tenían fama de tener un efecto absolutamente descalibrante en cualquier pareja. Las minas que estaban de novias generalmente volvían “confundidas” de ese viaje.
Sobre el final de la reunión cayó Juan Carlos, el novio de la flaca Mariela, que tenía unos años más que nosotros y pinta de “guacho me las sé todas”. Una de las chicas le preguntó: -¿Y vos que opinás de que tu novia venga con nosotros de viaje de egresados?-. Ahí se produjo un silencio total y todas las miradas, femeninas y masculinas, se dirigieron al bananazo. Su respuesta fue contundente:
-Ella quiere ir a ese viaje, y como yo a ella la quiero, también quiero que vaya.
Se escucharon unos “Ahhhh… qué dulce… qué divino…“ y si mal no recuerdo, algún que otro aplauso de la platea femenina”.
-Aprendan ustedes lo que es un hombre… -dijo una.
Estaban todas enloquecidas con el tipo y nosotros nos sentíamos unos microbios. La novia del chabón lo abrazaba como con miedo a perder ese tesoro de hombre que tenía, ante la envidiosa y deslumbrada mirada
de las demás compañeras y nuestras caras de orto.
Dos meses más tarde. Bariloche. Excursión nocturna a tirarnos en trineo en un lugar llamado Piedras Blancas. Hora de subir al micro para regresar al hotel.
El mencionado micro no podía emprender el regreso porque la flaca Mariela no aparecía por ningún lado. Lo estaba re-garcando al romántico del novio atrás de unos pinos con un ex-alumno del colegio.
¿Cómo se entiende? Sencillo, no les gusta lo que dicen que les gusta. Lo del pibe hubiera estado perfecto si hubiese sido parte del guión de una película. En la vida real no les gusta. Dicen que sí, pero no.
Flavio vivía con sus padres y sus dos hermanos. Esa noche habían ido a cenar su prima Silvana con su novio Ricardo. A la madre de Flavio se le ocurrió en ese momento que sería una buena idea invitar a Carla, la novia de su hijo, a cenar también para que conociera a Silvana y Ricardo. A Flavio también le pareció buena idea y se aprestó para ir a buscarla, pero antes de salir se dio cuenta de que en la mesa, que ya estaba puesta con anterioridad, faltaría un plato.
–Me voy a buscarla, pero antes agreguen un plato en la mesa –dijo.
Silvana y Ricardo observaban la escena.
-Andá, yo ya lo pongo, -le respondió su madre.
-No –dijo Flavio-, te vas a olvidar y no quiero que lo agreguen delante de ella, porque va a sentir que la invitamos de última. Agregalo ahora antes de que yo me vaya.
Silvana miraba a su primo con admiración. En cambio Ricardo, viejo bucanero, miraba de costadito y no emitía sonido porque no tenía la suficiente confianza con la familia de Flavio. Silvana entonces comenzó a dar rienda suelta a su admiración por la actitud de su primo:
- Qué caballero… viste Ricardo… qué buen novio… qué suerte que tiene la chica de tener un novio así.
Hasta que Ricardo se hinchó las pelotas y respondió ante la atónita mirada de Silvana y el resto de los presentes:
-¡¡Pero por qué no te callás!! ¿A vos sabés cuanto te dura un gil de esto?.. ¡¡Ni cinco minutos te dura!!... Y vos… -dirigiéndose a Flavio-, con que sigas así, sos firme candidato a los cuernos.
“Este tipo está mal de la cabeza”, pensó Flavio. Ricardo, viejo corredor de pistas, recibido en la universidad de la calle con título de honor en su doctorado en mujeres, predijo con su sabiduría lo que sucedería poco tiempo después. El perfecto novio Flavio, era corneado para el campeonato y abandonado por su tan querida y cuidada novia.
¿Hay alguna explicación lógica? Sí. No les gusta lo que dicen que les gusta.
LOS FUCKERS DEL FORO
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Nosefp
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Maska
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Falocrata
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Growter
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Ereshkigal
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Tic Tac
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Shurmana
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Tou
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trol (fuera de servicio)
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PPerico