Pero como le decía a @
dinpolero,
una cosa que es que no haya caza porque el ecosistema no da para más,
y otra que no la haya porque alguien está racionando ladinamente los conejos en el coto.
La escasez artificial, así como la abundancia artificial, son siempre reprobables. Moral y legalmente.
No obstante tendemos a ver demonios donde no los hay. Y otras veces pretendemos usa nosotros esas mismas herramientas.
¿Qué es Keynes sino jugar a impartir escasez/abundancia como si fueran las bridas de un caballo?, ¿Qué es una huelga sino el intento de forzar unas condiciones mediante una escasez temporal de mano de obra?, ¿Qué es la multiculturalidad sino un intento de rebajar el precio de la mano de obra?.
El tema es que si rechazamos el mercado intervenido, lo coherente es rechazarlo siempre.