Junto los mensajes, que creo que el segundo también va a mí.
Yo creo que en el análisis sobre la cohesión social es en lo que me acerco un poco a Marx, tampoco gran cosa. La sociedad está pero no está desde la Revolución francesa. Ha sido la única verdadera revolución que ha existido en la historia reciente, pues es la que implicó un cambio en la ideología que moldeaba la mente de todos los europeos, la desaparición de la religión cristiana. La burguesía, consciente de que necesitaba crear una nueva religión, hizo que el individuo y el dinero pasasen a ser los nuevos dioses, y el liberalismo la religión. En el feudalismo, Dios y el cristianismo eran el eje vertebrador de la sociedad, las creencias de todos eran las mismas, igual que sus motivaciones, sus anhelos y, sobre todo y más importante, sus placeres. Tras ello, el individuo comienza a ser el átomo social, la partícula más pequeña de que se compone la sociedad, cada uno distinto al de al lado, y no por grupos.
Desde que la burguesía mató a Dios, los individuos hemos buscado decenas de dioses sustitutivos: el dinero, el mercado, la sociedad como unión de individualidades, el amor (gente que se consagra a la concepción del amor romántico, idealización de la pareja o potencial), la justicia social (idealización de un planteamiento político como el comunismo o el veganismo)... Como todo ha fallado, ahora se buscan dioses en lo más mundano, es decir, en un individuo cualquiera o su creación: Messi, Pablo Iglesias, Abascal o Vox, Apple, la Sexta. La gente no es consciente, pero les tratan como a un Dios.
De la cohesión por la verdadera religión a la cohesión por un "contrato social", no con una fuerza sobrenatural, sino con un igual a ti. Pero ese contrato social no llega a ser una verdadera religión, porque era Dios quien le daba un sentido a tu vida, la igualdad con los otros nunca puede cumplir ese papel. Además, es inevitable pensar que tú eres más que el resto de tus iguales. Y sin nadie por encima, eres tú quien puede coronarse como el superior. Así comienzan los conflictos entre clases, entre grupos y entre individuos. Un nuevo contexto social, el de la competitividad, al que el ser humano no sabe responder: en qué medida es este hombre mi rival y en qué medida es mi compañero... de ahí que, como dices, intentemos parecernos y, a la vez, diferenciarnos.
El ser humano, para mí, no ha nacido para el liberalismo. La libertad, la igualdad y la responsabilidad para con los demás le vienen muy grandes y le hacen sentir perdido, sin Dios no sabemos vivir. Se me antoja un pensamiento algo incoherente en mí, porque no creo en ese Dios (es más, encuentro incoherente creer ahora, ya que tiene menos peso en tu ideología que incluso ser de un equipo de fútbol), pero... @
battousai1300
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Sobre el segundo mensaje. Trata temas de psicología o de pensamiento microsociológico que a mí se me escapan, pero sí me consta que la conducta humana en los tiempos actuales (no sé si pasados, no creo) se sustenta sobre cuatro funciones básicas: acceso a tangibles o actividades, evasión de tareas, búsqueda de atención y búsqueda de refuerzo positivo. Puedes encontrar explicación a cualquier conducta social al exponerla a este marco. De este modo, también puedes orientarlas.