Iniciado por
poIitikon
¿Que dices?
Vaya galimatías, vaya discurso enrevesado y vaya forma torticera de interpretar lo sucedido para que siga siendo culpa de la gestión pública.
Lo que te dije. Das a entender que lees mucho, pero lees mal. Tiene que encajar con tu visión ideologica aunque sea a martillazos. Toda esa parafernalia que has montado es uno de los mejores y más sofisticados juegos de trileros que he visto jamás.
Si la burbuja inmobiliaria se formó, y es muy simple, fue por tres razones. Verás como no hace falta todo ese laberinto. Navaja de Ockham total:
1) La posibilidad de calificar como no urbanizable por afecciones de muy diversos tipos grandes extensiones de terreno habilitaba a las comunidades autónomas a hacer reserva de suelo en favor de un desarrollo urbanístico presente y futuro ordenado, racional, armonizado y con visión de conjunto, y proteger todo lo protegible. ¿Que se hizo? Nada de eso. Viva el ladrillo. Laissez-faire.
2) La planificación urbanística, salvo contadas excepciones, no las realizaban los ayuntamientos. Eran los promotores los que le presentaban al alcalde macroproyectos multimillonarios en el que todos ganaban (especialmente los proponentes). El cotarro no lo dirigía el alcalde, ni el gobierno municipal, ni su oficina técnica, ni el secretario-interventor y su equipo jurídico (cuando lo había). No. Eran los propietarios del suelo, recién adquirido, los que llevabsn toda la iniciativa y al final se hacía lo que ellos decían o casi. Y encima tenían ese fatídico instrumento llamado "convenio urbanístico" que ataba económicamente al municipio al recibir unas cantidades "a cuenta" que jamás se podrían devolver, con lo que daba igual si había cambio de partido cada cuatro años. Era un contrato que había que respetar (como tú dices de los préstamos hipotecarios) y que nacía de la autonomía de la voluntad de las partes, en una versión muy original del liberalismo al actuar lo público como si fuera un privado pues en vez de mirar por el beneficio de la comunidad, el alcalde y sus concejales lo hacían por propio interés político al recibir fondos con los que poder practicar electoralismo a manos llenas. De nuevo laissez-faire, digas lo que digas, porque lo obtenido era el resultado de la confluencia de distintos intereses particulares que no tenían porqué (y de hecho así era) conducir al bien común.
3) Y por último los ciudadanos. No hacía falta obligar a nada a nadie. Cantos de sirenas. Solo con venderles la ilusión de una vida mejor a cambio de una firma era suficiente. Os queda una cuota de tanto, estáis trabajando los dos, os lo podeis permitir perfectamente ¿Vais a renunciar a tener calidad de vida? El miedo es cosa de ancianos. Sois jóvenes, bien formados profesionalmente y trabajáis en empresas que van viento en popa. ¿Vais a dejar pasar la oportunidad? Eso los que compraban para habitar, comprometiendo incluso el patrimonio paterno por aquello de los "dos avalistas". Nadie hablaba de riesgos. Y nadie hizo nada para limitar aquella locura. El endeudamiento privado superaba una y otra vez los récords históricos. Había familias que comprometían más del 50% de sus ingresos para el pago de la hipoteca, pero no pasaba nada porque todo iba como un tiro. En España llegaron a estar uno de cada tres billetes de 500 euros de toda la UE. El dinero nos salía por las orejas, y todos los que entendían del tema relataban como estaba el ambiente con una sonrisa de oreja a oreja ¿Y tú le pides al ciudadano medio que no caiga en la trampa, que sea más listo que todo eso cuando nadie, absolutamente nadie, ni siquiera sugería que existiese el más mínimo peligro?
Y después los que compraban para vender. Decisiones individuales de ciudadanos libres que velaban por sus legítimos intereses particulares y a los que el bien común les importaba un carajo. Por caro que fuese un inmueble no importaba, porque mañana valdría más. Tasaciones de locura, préstamos del 120%, por importes incluso superiores al precio de la vivienda para que aproveches y metas algunos "extras", periodos de amortización interminables... Una economía construida con deuda, y nadie de los que tenian la obligación de parar ese disparate, de decir algo, hacia nada. Laissez-faire. Compro, vendo y le largo el marrón a otro. ¿Esto es culpa de la gestión pública, o de la ausencia de ésta?
Pero no solo eso. Es que en el mercado financiero estadounidense y por tanto mundial se estaba gestando una monumental estafa piramidal. Y como el mercado inmobiliario depende del crediticio, la crisis financiera le dió justo donde más le duele. ¿Y como se gestó esa crisis financiera? ¿Por intervencionismo del Estado? ¿O porque nadie revisaba lo que los grandes grupos hacían con sus "atractivos fondos de inversión". Menos mal que ahí estaba la sociedad, a través de sus gestores públicos, para "democratizar" las pérdidas antes de que tuviéramos que usar el trueque para comerciar, que bien cerca estuvimos. Ese intervencionismo sí mola.
No, me niego a discutir lo evidente. El mercado necesita ser regulado, necesita ser vigilado y cuando se observan desvíos preocupantes necesita la intervención pública para que no se desmadre. Si en las terribles crísis se hubiera actuado antes y no después no nos veríamos como nos vemos. Eso para mí está clarísimo.